EL PROBLEMA NO ES COMETER ERRORES, APRENDER A REPARAR ES LO MÁS IMPORTANTE. EL USO DE LA RESTITUCIÓN COMO HERRAMIENTA FORMADORA.

Traducción independiente del texto de Diane Chelsom Gossen

Denominamos Restitución a žun proceso en el cual una persona acompaña a otra a tomar contacto con sus necesidades para orientarse en una situación en la cual tiene una necesidad que entra en conflicto con otros, con una norma o consigo mismo.

žEste proceso ayuda a restituir la armonía personal, reparar los daños o rupturas y encontrar adecuada satisfacción a sus necesidades bajo una mirada de interdependencia positiva.

žTiene que ver con la persona que queremos ser, nuestras creencias, y las relaciones que queremos construir.

Los docentes a menudo comentan con malestar que les resulta difícil enseñar a los alumnos por su mal comportamiento. Buscan técnicas de manejo conductual que permitan para las interrupciones y conductas disruptivas de los niños. Para muchos la disciplina es el aspecto más difícil de su práctica, convirtiéndose para ellos en una verdadera carga.

En general tendemos a ver la disciplina como algo que uno hace para controlar a otro. Con este enfoque, no sorprende que la disciplina sea vivida como un trabajo pesado.

Las maneras en que disciplinamos a los alumnos entran en cinco categorías, basadas en el estilo y grado de control que ejerzamos sobre la conducta del alumno.

Punitivo: El adulto usa la rabia, la crítica, la humillación o castigo corporal. El punitivo o castigador dice: “has esto de esta manera o de esta otra”. “Nunca lo haces bien”. “Tu siempre eres el último en terminar”.

Culpabilizador:  La persona en esta posición usa el silencio, hace comentarios que gatillan sentimientos de culpa, o frases moralizadoras. El culpabilizador dice: “¿Por qué no hiciste lo que debías?”, “Estoy muy disgustado contigo” o “¿cuántas veces tengo que repetírtelo?.

Amigo: esta persona usa la amistad y el humor para influenciar sobre otra persona. El amigo dice: “Hazlo por mí”, “recuerda lo que hice por ti”. “te voy a dejar eximido de responsabilidad esta vez porque no fue tu culpa”.

Monitor: Usa la disciplina de estímulo respuesta adminitrando recompensas y consecuencias. El monitor dice: “Has ganado ( o perdido) diez minutos de tiempo libre”. “ ¿Quieres ganarte un stiker hoy día?”, “Si actúas de esa manera, vas a tener que asumir las consecuencias”.

Promotor: Trabaja con el estudiante para pensar en cómo reparar el error. El manager dice: “¿Cómo vas a hacer las cosas correctamente?”, ¿Cuál es tu plan para resolver el problema?”, “ Qué clase de persona quieres ser”.

Las primeras cuatro posiciones son aquellas en las que el profesor hace algo al estudiante y él toma la responsabilidad sobre la conducta del alumno.

La última posición, el promotor, es aquella en la que el padre o profesor está haciendo algo con al alumno; permitiéndoles tomar responsabilidad sobre su propia conducta.  Como promotores, nosotros ayudamos a los estudiantes a examinar sus acciones y hacer una evaluación interna de lo que ellos pueden hacer para reparar sus errores, a eso se le llama restitución o práctica de la reparación.

Cómo hacer restitución:

La restitución se enfoca en resolver problemas y en fortalecer a la persona, lo cual lleva a la autodisciplina. En la planilla que se presenta a continuación se muestran problemas típicos de aula y algunas de las habituales maneras de manejarlos. Podemos observar que tanto el rol del profesor como castigador y como monitor implica  “hacer-le” algo al alumno, mientras que el rol del profesor como promotor de restitución se basa en fomentar que el niño resuelva el problema por sí mismo.

La restitución o práctica de la reparación se basa en la autodisciplina, no en el castigo. La restitución permite a los ofensores sanarse a sí mismos llegando a ser las personas que ellos quieren y ganar autoestima a través de corregir errores. Para empezar a trabajar la restitución el profesor debe tener las siguientes creencias acerca de los alumnos:

  • Los alumnos cometen errores: Los errores son normales y errar es una condición humana.
  • Los alumnos saben cuando han hecho algo equivocado. Incluso los pre-escolares comprenden que se han equivocado cuando han roto algo o herido a alguien.
  • Levantan barreras y usan gran cantidad de energía racionalizando los errores cometidos para preservar su autoestima cuando están siendo atacados o criticados. La culpa  y la crítica contribuyen a la conducta defensiva.
  • Pueden aprender mejores maneras de resolver las cosas si podemos mantenerlos del lado del éxito y no del fracaso. Si podemos verlos siempre como capaces , responsables y deseosos de mejorar o cambiar incluso de encarar sus errores, tienen el incentivo para cambiar.
  • Se fortalecen por la oportunidad de practicar la reparación. Justamente porque todos cometemos errores, una importante habilidad en la vida es aprender a repararlos.
  • No quieren mentir u ocultar sus acciones si creen que son capaces de ser comprendidos, si tienen la oportunidad de reparar los daños causados.

 

Cualquier persona que crea en estas afirmaciones puede comenzar a aplicar la restitución como modelo de socialización.

Los viejos hábitos de socialización hipercríticos, castigadores o sobreindulgentes son difíciles  de romper, sin embargo como la restitución es profundamente humana, responde a un profundo anhelo de cómo cada uno quisiera ser o haber sido tratado. Si permanentemente nos enfocamos en las fortalezas y recursos más que en las fallas, seremos modelos de socialización proactivos más que reactivos. Es necesario comenzar a estar menos preocupado por los errores que cometen los alumnos y más preocupado con la búsqueda conjunta de cómo corregirlos y crear algo positivo y nuevo a partir de una conducta equivocada.

 

Alumno

Castigador

Monitor

Promotor

Dice un sobrenombre

Humilla al alumno en frente de la clase

Escribe el nombre del niño en el pizarrón y le quita un privilegio

Ayuda al estudiante a decidir decirle a la persona algo agradable

Escribe en la pared

Agarra la manga del alumno

Hace escribir al niño 100 frases de tarea

Ayuda al alumno a decidir limpiar la pared durante el recreo .

Roba algo

Le grita y avergüenza al alumno

Envía a castigo el día sábado

Ayuda al niño a decidir devolver el objeto robado y preguntar como puede enmendar el daño

Golpea a alguien en la fila

Envía al alumno al director para ser castigado

Manda al niño afuera (time-out) o lo manda al final de la fila

Trabaja con el alumno en un plan acerca de cómo hacerlo mejor, un plan que se enfoque en el respeto, cordialidad y cuidado de los demás

 

 

El ALUMNO DICE

El PROFESOR DICE

“Lo siento.”

“Está bien, todos cometemos errores, así es como vamos aprendiendo.”

“Mándeme afuera castigado”.

“¿Crees tu que aprenderías algo saliendo afuera castigado? Si no es así, por qué querría yo enviarte castigado afuera.”

“Yo no lo hice.”

“No estoy interesado en la falta, en quién le hizo qué a quién. En lo que estoy interesado es promover que arregles tus relaciones con otros.”.

“La embarré, no debí haber hecho eso.”

“Tu no actuaste así por nada, qué necesitabas o qué te movió a hacerlo.”

“Grítame: échame, no me preocupa.”

“ ¿De qué manera eso aumentaría tu fortaleza? Y si eso no aumenta tu fortaleza, no va a lograr ser una verdadera restitución de ti mismo y de los que tú no trataste bien.”

“Lo haré por ti ( reparar a otro).”

“No lo hagas por me, decide si para ti es valioso hacerlo.”

“No llames a mis padres!”

Tu puedes llamar a tus padres y contarles a ellos que en tu colegio se entiende a los alumnos cuando cometen errores y que tu quieres la ayuda de ellos para encontrar una solución.

Artículos relacionados